Ex participante de Mundos Opuestos reflexiona sobre su vida tras el reality y nuevos desafíos: "Me miro al espejo y no me reconozco"



Con 23 años, Thammy Palma fue una de las concursantes más jóvenes del reality "Mundos Opuestos", y actualmente continúa construyendo una carrera marcada por la superación personal y el éxito en las pasarelas. Nacida en Los Ángeles, región del Biobío, creció ligada al tenis gracias a su padre entrenador, pero con el tiempo se transformó en influencer y modelo.
En una reciente publicación en redes sociales, Thammy compartió un profundo análisis de su vida tras su paso por el programa. Recordó cómo su participación en el reality marcó un antes y un después: “La verdad… si me preguntan de corazón, siento que estoy un poco perdida. Desde el momento en que tomé ese avión rumbo a Perú y me lancé a una experiencia que nunca imaginé vivir, todo cambió dentro de mí. Entré a un reality siendo solo una chica con sueños gigantes y mucho miedo, pero fui una de las 20 primeras, y aunque lloré, aunque temblé… fue una de las vivencias más increíbles de mi vida” comenzó expresando la joven.

Francisco Kaminski habló de su vínculo con el "Rey de Meiggs": "Yo lo siento súper amigo"
Sin embargo, Thammy también confesó que después sintió que se apagó, dudando entre seguir en el mundo del contenido digital, dedicarse por completo al modelaje o rendirse. "Me costaba hasta levantarme de la cama… pero hace tres días decidí ponerme los tacos, esos mismos que me hacen sentir poderosa, y volver a caminar hacia lo que siempre soñé” continuó la influencer.
La joven, que cuenta con más de 1,3 millones de seguidores en Instagram, reveló que hace pocos días decidió volver a ponerse los tacos y retomar su sueño incursionando en el mundo del modelaje: “Siempre quise modelar. Siempre quise que me sacaran fotos, que me vieran, que me aplaudieran no solo por cómo me veo, sino por lo que soy. Soñaba con eso desde lejos… y hoy, lo estoy viviendo"
Su mensaje culminó con una declaración inspiradora sobre su actual etapa personal y profesional: “Esto no es solo una pasarela. Es mi camino, es mi vida, son mis sueños hechos carne y hueso. Me miro al espejo y no me reconozco… porque esa mujer que veo ahora, esa mujer fuerte, valiente, hermosa, y con fuego en el corazón… ¡soy yo!” culminó.