Fugitivo internacional: El radical cambio de look de sicario del “Rey de Meiggs” para eludir a la justicia
Durante la tarde de este sábado, Carabineros confirmó la captura en Colombia de Alberto Carlos Mejía, un peligroso sicario venezolano acusado de participar directamente en el homicidio de José Felipe Reyes Ossa, conocido como el “Rey de Meiggs”.
La detención se concretó gracias a un operativo conjunto entre el OS-9 de Carabineros, la PDI, Interpol y la Policía Nacional de Colombia, quienes grabaron y se encargaron de la detención del sicario.
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Pese a lo anterior, al momento de su aprehensión Mejía destacó por varios detalles físicos: el delincuente venezolano presentaba un aspecto muy distinto al que tenía cuando estuvo detenido en Chile.
El imputado, señalado además como una de las cabecillas del Tren de Aragua, tiñó su cabello de rubio y además mantenía una barba que no tenía en las fotografías previas difundidas en nuestro país. Pese al cambio de imagen, las policías lograron identificarlo y concretar su captura en territorio colombiano, mayoritariamente gracias a los tatuajes que mantiene el imputado.
Detención y crimen del sicario venezolano
El caso se remonta al 19 de junio pasado, cuando Reyes fue interceptado y baleado en Ñuñoa por un grupo de tres venezolanos. Según la investigación, el ataque habría sido encargado por Wilson Verdugo, considerado el presunto autor intelectual del crimen.
Mejía fue detenido pocos días después y formalizado por homicidio, quedando bajo la medida cautelar de prisión preventiva.
Sin embargo, un presunto error administrativo permitió su liberación desde un recinto penitenciario, lo que facilitó su escape del país y motivó una orden de captura internacional.
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Desde entonces, las policías seguían sus pasos en distintos países de la región.
Con su detención en Colombia, el proceso ahora queda en manos de la justicia de ese país, que deberá resolver los trámites vinculados a su eventual extradición.
De concretarse, Mejía volverá a enfrentar a los tribunales chilenos por su participación en el crimen que conmocionó al comercio de Meiggs.
